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Los estudiantes ya están de vacaciones; se acerca el verano y los pueblos van aumentando su población. Las piscinas abren sus instalaciones y los ríos cuentan con una mayor afluencia de público.
Los que visitáis Castrocalbón en la época estival, sabéis que en el río Eria hay una zona muy frecuentada por la juventud, que se conoce como «El Baño de las Señoritas».
¿Alguna vez os habéis preguntado el porqué de ese nombre?.
A mi también me ha podido la curiosidad; así que he buscado información al respecto.
Cuando los libros no te resuelven las dudas; cuando el todopoderoso google no es capaz de darte una respuesta; no te queda más remedio que recurrir a la enciclopedia que alberga el saber y los conocimientos infinitos, acumulados a lo largo de los años: «Nuestros Mayores».
Un día me acerqué al «corrillo» que, por las tardes, forman los vecinos buscando el «fresco» a la sombra de las casas. Allí pregunté por «El Baño de las Señoritas».
Una mujer octogenaria, mi vecina Jacinta Ballesteros, fue más eficaz que las nuevas tecnologías y resolvió mi duda.
Me cuenta la señora Jacinta que cuando ella era adolescente, la sociedad era un tanto machista y estaba mal visto que las mujeres fueran a bañarse al río.Además, había otros impedimentos. Las necesidades de la época eran tantas ,que en ocasiones no había dinero para poder comprarse una prenda o traje de baño y por si fuese poco, esos meses coincidía con la siega y recolección del cereal. Las adolescentes del pueblo se pasaban el día con sus padres, realizando las labores agrícolas.
Solo unas pocas privilegiadas podían permitirse el lujo de acercarse al río. Procedían de familias más adineradas, como las hijas del alcalde, el médico, el secretario,el alguacil, algunos terratenientes, etc.